Imagina un 8 de diciembre de 1980 en Nueva York. Era de noche y John Lennon regresaba de un paseo por Central Park junto con su compañera Yoko Ono.
De pronto, se escuchó una voz, —“¡John, John!”— y “el maestro” volteó, simultáneamente un estruendo sacudió la calle y un capítulo de toda una generación quedó escrito con sangre.
Hace 26 años se cerró un ciclo dentro de la historia musical contemporánea con la desaparición de Lennon, para muchos un poeta, soñador, pacífico y revolucionario.