Hoy comenzó la lluvia muy fuerte en Monterrey, inclusive como pocas veces había mucho tráfico, tal vez como mi hermana Luisa dijo es hora pico y más siendo Viernes, me sentí como en el DF la última vez que fuí que también ese día estaba lloviendo bastante fuerte y había tal tráfico que esa vez me puse a tomar fotos a la lluvia, a la calle y los carros que pasaban por las calles principales, en ese momento vi que Luisa activo para limpiar el vidrio los limpiaparabrisas, todo para que se pudiera ver el camino que parecía interminable, inclusive puedo decir que me dormí durante todo el trayecto, la tarde estaba nublada, el cielo estaba cubierto de nubarrones negros esperando un momento exacto para sacar todo y purificar lo que es el ambiente. Los limpiaparabrisas se quedaron un momento varados y me daban la daban la sensación de estar mirando cuando uno llora en aquellas gotas que escurrían por el vidrio. Por alguna razón me acordé de Victor, de todo lo difícil que han sido estas semanas, en las cuales pudo más mi inseguridad que lo fuerte que a veces soy y que sigo sin encontrar ese rasgo que solo tu V detectas con cierta facilidad, me acordé de cuando discutimos la última vez antes de venirnos y los ojos le brillaban como aquella ventana donde las gotas estaban estáticas, recuerdo aquella vez que lloré de emoción cuando estábamos bailando mientras se escuchaba de fondo nuestra canción de "Contigo en la distancia" y después le seguía la de "Un beso grande" de Edgar Oceransky, aún recuerdo cuando con su memoria de mp3 nos pusimos a grabar los saludos que eran para mi familia y mis amigos y termino abrazándome, bailando y solo se oían de fondo los besos bien "tronados" y dados, solo de acordarme me da risa, ver que era y es tan espontaneo, tan ocurrente, así como es de carácter fuerte, cuando es cariñoso, es super cariñoso, pero cariñoso en extremo diría yo.... y después me dí perfecta cuenta de esas lágrimas… vi que eran reflejo de que el cielo se sentía "triste" como me había sentido yo... y después cayeron en mi unas gotas que tenían mis ojos eran lágrimas que estaban esperando como la lluvia salir y purificar la tristeza que me embargaba y la única que podía hacer algo por MI era YO MISMA nadie más y eso lo comprendí a tiempo...(afortunadamente).